El instinto maternal versus la presión social.


El instinto invita a la especie humana a necesitar y prodigar amor para existir. Somos hechos así y cuesta mucho más negarlo que aceptarlo. Eso explica el por qué sentimos cargo de conciencia si no cargamos a nuestro bebé que llora en la cuna.
Es natural que cuando nace un bebé, los amigos y familiares se acerquen a dar consejos y, en ocasiones, pueden ser muy distintos unos de otros. Esto genera en los padres muchas dudas y es allí donde se enfrentan el instinto y la presión social.
Mis recomendaciones para estos casos son:
1.- Recordar que cada caso es único, por lo que debemos evitar generalizar y hacer comparaciones.
2.- Tomarse el tiempo para meditar en soledad y para escuchar mejor a nuestro corazón que, en la mayoría de las veces, no se equivoca.
3.- Investigar mucho porque existen diferentes formas de criar y de esta manera podremos encontrar la que más se adapte a nuestros ritmos y necesidades como familia.
Es importante destacar que lo que para unos es lo habitual, para otros no lo es, por lo que debemos respetar el espacio de crianza ajeno y hacer respetar el nuestro.

Es natural que cuando nace un bebé, los amigos y familiares se acerquen a dar consejos y, en ocasiones, pueden ser muy distintos unos de otros. Esto genera en los padres muchas dudas.

Louisiana Panagua